La luz cálida del atardecer en los cerros ocres y rojizos, capillas coloniales recortarse(hier) sich abzeichnenrecortadas sobre un cielo diáfano/adurchscheinenddiáfano, el sol refulgirleuchtenrefulgiendo en los muros añoso/abejahrt, betagtañosos de una casa de adobe… “Salta, tan linda que enamora”, dice el eslogan con que la provincia difundirverbreitendifunde sus atractivos. Quien haya contemplado alguna de esas postales en directo puede confirmar que la frase es más que mero/abloß, reinmera retórica publicitaria.
De todas las provincias del noroeste argentino, Salta es la que tiene mayor infraestructura para el viajero que se dirige a esta región en busca de las raíces de la cultura precolombina. Es la puerta de entrada a la la idiosincrasiaWesenidiosincrasia de este territorio tan genuino/aauthentischgenuino y bello como primitivo.
La capital provincial —también llamada Salta— se encuentra al pie del cerro San Bernardo y la precordillera, y se distingue por sobre otras ciudades del país por su arquitectura hispánica, su la improntaPrägung; Charakterimpronta religiosa y tradicional, sus festivales folklóricos y su el vía crucis(hier fig.) Leidenswegvía crucis.
Sus la vereda(arg.) Fußwegveredas estrechas enmarcareinrahmenenmarcadas por las montañas que la rodean traen al presente el espíritu colonial de antaño. El punto de referencia obligado es la plaza 9 de Julio, que combina construcciones como el el cabildo(SAm) RathausCabildo Histórico, hoy reconvertido en Museo Nacional o la Catedral Basílica, y otras edificaciones de fines del siglo XIX.
Más allá de las caminatas y las visitas a los puntos de interés, una buena vista panorámica siempre ayuda a poner en perspectiva una ciudad que recién estamos conociendo. Por eso, no hay que dejar de subir (a pie, en automóvil o en teleférico) al cerro San Bernardo.
En su cima se eleva la imagen del Cristo Redentor, fundir en cobrein Kupfer gießenfundida en cobre sobre un el pedestalFuß; Sockelpedestal. Sin embargo, lo que por estos días llama más la atención es un nuevo el emprendimientoUnternehmenemprendimiento gastronómico con unas vistas sobrecogedor/aüberwältigendsobrecogedoras: en abril de este año se mudó allí El Baqueano, un restaurante de Buenos Aires incluido entre los mejores de Latinoamérica en el ranking 50 Best Restaurants.
Su aportación al capital culinario de la provincia es enorme. Ofrece la posibilidad de degustar las materias primas más genuinas de la región, como papas andinas cultivadas a 3500 metros sobre el nivel del mar o carne de llama tratada con complejas técnicas de alta cocina. Y no fue pensado solo como un restaurante, sino como una herramienta social para poner en valor el trabajo de los pequeños productores de la región.
La la estadía(SAm) Aufenthaltestadía en Salta es una buena excusa para probar su famosa empanada en cada parada. Esa exquisita masa rellena con carne de vaca cortada a cuchillo, que se cierra con un el repulgue(arg.) Randverzierungrepulgue y se come con una salsa de tomate algo picante, es la ofrenda culinaria más típica con la que muchas familias se ganan la subsistencia.
“Nuestra empanada es reconocida en el mundo”, dice el cocinero Tupac Guantay, que es una voz autorizada. Este cafayateño/aaus Cafayatecafayateño tiene un programa de televisión en el que recorre el país probando las mejores empanadas. Como “embajador” de la cocina salteña, enumera las la virtudVorzugvirtudes de este producto local: “Son chicas, por eso son más fáciles de comer que las demás, y tienen papa, lo que hace que baje la intensidad del sabor de la carne y las especias entre bocado y bocado”.
Las peñas folclóricas de la calle Balcarce, donde se interpretan zambas, chacareras y gatos, entre otros géneros musicales tradicionales, tienen la atmósfera perfecta para degustarlas. el maridajeVerbindung; SymbioseMaridaje más autóctono de sabor y ritmo no se consigue. Una advertencia: se las conoce como “de patas abiertas” porque son tan jugosas que hay que comerlas con las piernas separadas para no ensuciarse.
La Ruta de los Valles: un encuentro con la inmensidad
El circuito turístico más transitarbefahren; besuchentransitado por los millones de viajeros que año a año recibe Salta es el de los Valles Calchaquíes, que puede hacerse en dos sentidos, pero siempre siguiendo la línea marcada por la ruta del vino más alta del mundo, que alcanza los 3100 msnm, el punto máximo para un el viñedoWeinbergviñedo.
Por la ruta nacional 68, a 65 kilómetros de la ciudad de Salta se encuentra el el diqueTalsperredique Cabra Corral. En esta región, que se ubica al sur del Valle de Lerma, comienzan los el emprendimiento bodegueroWeinkellereiemprendimientos bodegueros. Además es un el imánMagnetimán para los amantes de la acción: es el segundo embalse artificial más grande de Argentina, y durante el verano se practica esquí acuático, rafting y buceo, entre otras actividades.
Continuando por la misma ruta, se pasa por Alemanía —con tilde en la í—, un pueblito de montaña casi fantasma, bautizado así en honor a los trabajadores alemanes que construyeron un el ramal de trenSchienenstrang, Gleisramal de tren que hoy ya no funciona. Este escenario cinematográfico estimula la imaginación. Es difícil resistirse al misterio de su estación desierta y sus casas abandonadas, así como a las leyendas sobre sus años de esplendor, habitados por aventureros proclive amit Hang zuproclives a los excesos antes de la Primera Guerra Mundial.
Desde aquí se ingresa a la la quebradaSchluchtQuebrada de las Conchas, donde se filmó una de las escenas más recordadas de la película Relatos salvajes (Wild Tales), el filme nacional más visto de la historia de Argentina que además fue nominado al Oscar. Fue en este terreno, que teñirse desich färbense tiñe de todos los rojos posibles por los caprichos de la naturaleza, donde se rodó la furiosa escena de una la riña desbocadavöllig eskalierter Streitriña desbocada entre dos conductores.
De todas las formaciones que se ven en este el tramo(Strecken-)Abschnitttramo, las más imponentes son la Garganta del Diablo y el Anfiteatro, una la bóveda naturalnatürliches Gewölbebóveda natural de rocas de más de 20 metros con una acústica tan perfecta que hasta se han organizado conciertos a cielo abierto para que turistas y lugareños puedan disfrutarla.
Lea el reportaje completo en ECOS 09/22 y descubra las maravillas de Salta
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